Dead Cat Bounce es un término coloquial utilizado en los mercados financieros para describir una recuperación o rebote temporal en el precio de un activo o valor en declive. El nombre implica que incluso un gato muerto rebotará si cae desde una gran altura, lo que sugiere que el rebote es solo temporal y no indica una reversión real de la tendencia a la baja del activo. En esencia, se refiere a un rally de corta duración en medio de una tendencia bajista más amplia, frecuentemente seguido por la reanudación del declive.
Ejemplo: Durante un mercado bajista, una acción experimenta una caída significativa en su precio durante varias semanas. De repente, hay un breve período en el que el precio de la acción aumenta, lo que lleva a algunos inversores a creer que lo peor ha pasado y que la acción está en camino hacia la recuperación. Sin embargo, este rally resulta ser un rebote muerto del gato, ya que pronto el precio de la acción vuelve a su trayectoria descendente.
Caso: En 2008, durante la crisis financiera global, muchas instituciones financieras experimentaron fuertes caídas en sus precios de acciones. Algunas de estas acciones vieron breves rebotes en sus precios, lo que llevó a los inversores a creer que lo peor de la crisis había pasado. Sin embargo, estos rebotes fueron frecuentemente de corta duración y fueron seguidos por nuevas caídas a medida que la crisis financiera se profundizaba. Estas recuperaciones temporales fueron ejemplos de rebotes muertos del gato en medio de un mercado más amplio en declive.
